sábado, 8 de enero de 2011

{3/365}eL salto



pReparados, liStos, Ya. Estaba preparada. Había comprendido que a veces no es cuestión de dar pequeños pasos, sino de saltar. Y ahi estaba, en una azotea en Tánger. Se concentró, pidió ayuda a todos los seres de luz que la acompañaban y saltó




Miró al mar y se deshizo en sensualidad. En esa sensualidad consistía el salto más alto que había dado en años.